La primera ya pasó a un segundo lugar. La no presencia de la Familia Real ha supuesto la no presencia en portadas, imágenes televisivas y demás.
Estas pruebas por suerte a por desgracia, tan sólo interesan a los regatistas y a nadie más. De las grandes portadas hemos pasado a los recuadros, a no ser que paguen por salir. La Copa del Rey, tiene su atractivo por ver al Rey tomando parte en la misma y por las caras conocidas que acuden a los pantalanes y a las fiestas que se celebran, convirtiendo la zona del Real club Náutico de Palma en un plato de Sálvame de Luxe .La pregunta es que cuesta realmente a los ciudadanos estas fiestas. Que aportan las instituciones para que se puedan celebrar.
Yo defiendo que la prueba deportiva como tal se celebra en nuestra Bahía. Que los verdaderos deportistas luchen por ganar la prueba, pero por desgracia es lo que menos interesa. Pero aun así creo que deben seguir celebrándose porque ambas son un estandarte de lo bien que sabemos hacerlas cosas en nuestra isla.