El gran partido de Isco en su tierra natal -con golazo y asistencia del internacional incluidos- ha sido determinante para que el semifinalista de Champions derrotara a un rival que tiene más de un pie y medio en la categoría de plata.
A la media hora de juego, el malagueño ejecutó un libre directo que entró por toda la escuadra ante la impotencia de Roberto. Luego, pidió perdón.
En el 63, un robó de Casemiro generó una contra que empezó Lucas Vázquez, prolongó Benzema y acabó en una asistencia de Isco para que el brasileño completara el circulo anotando el segundo gol madridista. Más tarde, cuando fue sustituido, abandonó el terreno de juego entre los aplausos de sus paisanos.
El tanto del Málaga llegó en el descuento con un remate en semifallo de Rolán que pudo cometer falta sobre el joven Vallejo.