"Es un derbi que hacía más de 30 años que no se jugaba y siempre ha existido una rivalidad entre Baleares y Mallorca. Debe ser una fiesta porque es el derbi más importante y esperamos ganarlo. Estuve muchos años en el fútbol base del Mallorca pero como profesional llevo 5 años en el ATB y me siento muy identificado y queremos dar una alegría al aficionado"
"En estos derbis siempre hay una carga emocional. Es importante el aspecto mental. Esta semana es diferente, dentro del vestuario a medida que se acerca el partido se nota porque tenemos gente mallorquina y cercana con el aficionado".
"El Mallorca juega en su campo, tiene una buena dinámica y ha hecho una primera vuelta muy buena pero es un derbi y puede pasar de todo, en la ida ya los jugamos de tú a tú y lo demostramos".