La mallorquina Lucía Corrales, campeona del Mundial sub 17 el año ha pasado, ha dado más brillo a su palmarés teniendo un papel protagonista en el combinado nacional durante el torneo y en el encuentro decisivo, en el que tuvo el gol en el minuto 88 y se topó con la portera en su lanzamiento en la tanda.
Cerró así España su camino para levantar el que es su quinto trofeo europeo de la categoría en una andadura en la que se impuso a Islandia (0-3), a República Checa (7-0), cayó contra Francia (2-0) y se sobrepuso en las eliminatorias para vencer a Países Bajos (1-0) y en última instancia a Alemania.
Eso sí, tuvo que ser en los penaltis de un partido en el que España entró mejor, más conectada y hasta con cuatro disparos en la primera media hora, mientras que las germanas no lo hicieron hasta pasada la media hora.
Ninguno de los remates, seis de España y cuatro de Alemania en los primeros 45 minutos, puso en aprietos a las guardametas de dos selecciones que se conocen perfectamente, ya que el pasado verano fue Alemania quien se impuso en el Europeo sub-17.
En la segunda mitad las germanas salieron más enchufadas y una ocasión de Alara Sehitle, quien con solo 16 años suma ya protagonismo en una gran cantera como la del Bayern de Múnich, y dos disparos de Franziska Kett pusieron en aprietos a la portera española Meritxell Font.
La mejor oportunidad de España en el partido tuvo que esperar hasta el minuto 88 cuando Lucía Corrales mandó al palo un mano a mano. Mala noticia para el equipo dirigido por la exfutbolista Sonia Bermúdez tres minutos más tarde de ver cómo Lucía Moral ‘Wifi’ tuvo que abandonar el terreno de juego en camilla por una lesión en la rodilla derecha.
Ya en la prórroga, el miedo a perder marcó el choque y ninguna selección tuvo oportunidades claras de marcar, por lo que el título se decidió en la tanda de penaltis donde apareció Meritxell Font para guiar a España a su quinto título en categoría sub-19 y el segundo consecutivo.
Dos paradas suyas en los disparos desde los once metros fueron clave para que España se impusiera después de lanzar cinco penaltis cada selección en una tanda en la que se fallaron los cuatro últimos. El decisivo lo erró la alemana Pauline Deutsch, quien disparó desviado.