El choque será el jueves a las 19 horas en un escenario mayúsculo como el WiZink Center de Madrid. Los baleares vivirán su cuarta participación en esta competición, la tercera de manera consecutiva en busca del pase a semifinales por primera vez.
El conjunto mallorquín vivirá, este fin de semana, su cuarta participación de la Copa, la tercera de manera consecutiva, con un objetivo claro, superar la barrera de cuartos de final que, hasta ahora, siempre se le ha atragantado al equipo insular.
A partir de ahí, la escuadra de Antonio Vadillo no quiere renunciar a nada a pesar de que las sensaciones con las que se llega a la competición no son las idóneas y siendo conscientes de que el sorteo le deparó un duró camino al Palma que para levantar el título podría tener que enfrentarse a los tres grandes del fútbol sala nacional.
El primer escollo será ElPozo Murcia del mallorquín Miguelín, un equipo que se ha mostrado como la gran bestia negra de los isleños en los últimos años. Ellos fueron, precisamente, los verdugos del equipo verde pistacho en la pasada edición de la Copa de España que se disputó en Ciudad Real. En esa ocasión los de duda se impusieron por un gol a cuatro.
El conjunto mallorquín se desplazó a Madrid el martes por la mañana con todos los jugadores a disposición del técnico y en plenas condiciones físicas. En la tarde del miércoles el equipo tuvo su primera toma de contacto con el escenario del torneo con la realización del último entrenamiento antes de la gran batalla.
De los quince jugadores que componen la plantilla, Vadillo tendrá que descartar a uno e inscribir a catorce jugadores para disputar el primer partido. En caso de victoria, el Palma se enfrentaría en semifinales, el sábado a las 18 horas, al vencedor del cruce entre Movistar Inter y CA Osasuna Magna que se disputa justo después del choque de los mallorquines ante ElPozo Murcia.
La Copa de España se presenta como una nueva oportunidad para el Palma para seguir ampliando la página más dorada de la historia del club en una competición especial para todos los aficionados al fútbol sala y que reúne a los ocho mejores equipos de la primera vuelta. Pasar la primera ronda ya sería histórica para la entidad, que no logró hacerlo en ninguna de sus cuatro participaciones anteriores, aunque el equipo quiere demostrar que es capaz de competir contra los mejores en las grandes citas.
En esta edición de la Copa no faltarán alicientes. Uno de ellos es el escenario, el WiZink Center de Madrid, que tiene capacidad para cerca de 17.500 aficionados.
La plantilla del Palma Futsal no estará sola en Madrid. Unos 200 aficionados se desplazan desde la isla para animar y llevar en volandas al conjunto mallorquín con la ilusión de dar la primera sorpresa del torneo. El hecho de jugar la eliminatoria de cuartos de final en jueves ha sido un hándicap para que la marea verde pistacho sea más numerosa pero, sin duda, que los presentes en el WiZink Center se harán notar como lo han hecho en las demás ocasiones.
