El Palma Futsal afronta una gran oportunidad para reivindicarse tras la derrota de Barcelona. No hay mejor sitio que Son Moix para exhibir su nivel y demostrar que lo de la semana pasada fue un accidente. Los de Vadillo son el único equipo que han ganado todos los partidos en casa y que no han perdido ni un solo partido de su feudo y se agarran a su vínculo con su afición para conquistar una nueva victoria que les deje a un paso de la clasificación para la Copa de España y, de paso, recuperar el liderato de la Primera División. Para ello tendrán que ganar este viernes, a las 20:00 horas, al Naturpellet Segovia, un equipo que pese a ser el colista ha sacado todos los puntos a domicilio y que llega tras ganar a ElPozo Murcia en su última salida. La plantilla no mira la clasificación y afronta el partido sabiendo que los números no juegan en la pista. Hay que ganarse el mérito de estar arriba en cada partido y no confiarse con ningún rival por mucho que la clasificación diga lo contrario. Los segovianos han ganado un partido y han empatado otros dos fuera de su pista y eso destaca el nivel de un equipo capaz de poner contra las cuerdas a cualquiera. El Palma Futsal llega a la cita tras reflexionar y corregir los errores de la semana pasada con el objetivo de recuperar la dinámica ganadora del comienzo liguero. El equipo acumula siete victorias y dos derrotas y está a dos puntos del líder, el Barça Lassa, que ya ganó su partido adelantado de esta jornada por lo que un triunfo de los baleares les aupará a la primera posición. Los veintiún puntos en el casillero, nueve de ventaja sobre el corte para clasificarse para la Copa de España, hacen que los mallorquines estén a dos pasos de certificar su quinta clasificación consecutiva para una de las grandes competiciones del año.
El Palma vuelve al escenario en el que más brilla y en el que alcanza su máxima solidez. Ha ganado los cuatro partidos que ha jugado en el Palau Municipal d’Esports de Son Moix y apenas ha encajado cinco goles. Nadie presenta unos dígitos tan fiables en casa y el equipo volverá a estar arropado por una afición entregada y que cada partido llena el pabellón. Es a lo que se agarra un equipo que quiere recuperar su mejor versión para brindar un nuevo triunfo que vaya acompañado del liderato aunque sea de forma circunstancial.