Andreu Matalí, una vez superados las molestias musculares, volvió a erigirse en el líder anotador con 18 puntos, y eso que por faltas no pudo disputar los 5 minutos extras.
Salió el Hestia Menorca a frenar a su impetuoso rival, un CB Vic que desde el cambio de entrenador ha modificado su propuesta. Hasta ocho jugadores del equipo de Oriol Pagès anotaron en el primer cuarto con dos triples de Xavi Hernández que dieron alas a los menorquines, capaces de generar segundas opciones gracias a los 4 rebotes ofensivos, papel en el que destacó Jan Orfila (20-25).
Se desperezó el Vic en el segundo cuarto y sus estrellas, Pablo Rivas y Julián Garrote, alcanzaron los 12 puntos cada uno para recortar al máximo una diferencia que al descanso era mínimamente favorable al Menorca (47-48). Parcial un parcial de 7-0 para los locales les puso momentáneamente por delante (38-37). El Menorca flaqueó en su aro, concediendo 6 rebotes, tres de ellos para Vidal, pero fue capaz de mantenerse por delante.
Tras el paso por vestuarios, el Hestia Menorca recuperó las buenas sensaciones y abrió brecha gracias a un 8-0 (53-60) que obligó a Raul Laita a pedir tiempo muerto. Por entonces, Jan Orfila ya se había adueñado de la pintura con 12 puntos y 9 rebotes, ayudado por los 14 puntos de Matalí. En el minuto 30 la diferencia era de 66-72.
Los catalanes jamás perdieron la cara al partido y lograron remontar la diferencia en los instantes finales gracias, en parte, a las concesiones menorquinas, tras ir ganando 74-79 a 5 minutos para el final. Matalí, con 5 faltas, ya no pudo seguir en cancha y la faena en la zona la tuvo que asumir Jan, con Jiménez y Hernández alternándose en la dirección de juego. Con todo, el empate a 86 llevó el duelo al tiempo extra.
En el añadido, hubo más nervios e imprecisiones que aciertos, gran papel de Poyatos cazando 4 rebotes, y el Menorca fue capaz de sumar un triunfo importante sumando apenas 6 puntos y asfixiando a un Vic que tuvo la última posesión para llevarse la victoria.