El Hestia Menorca, consciente de la dificultad que entrañaba la visita a la cancha del JAFEP Fundación Globalcaja la Roda, aplicó la máxima concentración y el control justo de las emociones –en un entorno de mucha presión- para llevarse un partido de alternativas, de intercambio de parciales y ventajas en el electrónico (69-78). La palabra E-QUI-PO tomó cuerpo una vez más (las rotaciones aportaron el 42% de la anotación), para regresar a la Isla con el quinto triunfo –cuarto consecutivo- en la maleta.
El primer cuarto lo disputamos montados en el “tren de cercanías”. Todas las canastas en juego las generamos en situaciones de máxima proximidad al aro: desde el poste bajo (Urko), mediante penetración (Xavi), vía rebote ofensivo (Bute) o tras asistencia (Méndez). El 2-0 inicial del pívot croata Krajina tuvo una respuesta contundente por esos canales: 2-8 y minuto de La Roda, con 7:10 por jugar. El quinteto de Albacete hizo valer su físico para “regresar” al partido y establecer un marco de igualdad, fortalecido por dos triples del británico cedido por el Fuenlabrada, Jacob Round (17-17).
Corbacho y Covington aportaron las primeras anotaciones lejanas en el origen del segundo acto. Sin embargo, un par de acciones de Elechi y Krajina –los ‘cincos’ locales, en pista al unísono- invitaron a nuestro entrenador a parar el partido (25-22, a 5:15). Sería la máxima ventaja de La Roda en todo el partido, no permitimos más. Cruzado el ecuador, ajustamos la defensa para limitar la capacidad anotadora rival e incrementamos lo justo la nuestra para alcanzar el vestuario con ventaja: 30-33 (13-16).
El tercer cuarto fue un intercambio de rachas y, por ende, cambios de ventaja en el marcador. El acierto de Convington y el dominio de Okeke en ambos tableros derivó en un primer tirón (34-42), que La Roda anuló con tres acciones de valor tres: 43-42. Una mate de Okeke y un 2+1 de Urko fue la respuesta inmediata (43-47). El partido entro en una fase de desenfreno anotador, por la vía de los 6,75 metros, de la que salimos circunstancialmente ganadores tras los aciertos de Corbacho y Pitu (52-57; parcial de 22-24).
El partido discurrió, tramo arriba tramo abajo, por la misma senda. A cualquier amenaza local de voltear el marcador, se sucedían un par de anotaciones para mantener el mando del asunto. 56-64 tras triples de Pitu y canasta de Guebert. Sin embargo, la constancia física de La Roda dificultó ir más allá, bloqueó la fluidez de nuestros ataques y mantuvo sus constantes vitales unos minutos más. Hasta que el doble acierto desde los 6,75 de Méndez y Corbacho nos permitió alcanzar por primera vez el +10 (62-72, a 2:56). Tiempo muerto local. El ‘quinto de la tarde’ del alero mallorquín (64-75, a 2:07) ya adquirió tintes de definitivo en el luminoso. La gestión de esa ventaja y las últimas posesiones bastó para atar una nueva victoria, certificada con un último hundimiento del balón a cargo de Okeke (69-78; parcial de 17-21).
