El equipo mallorquín parte con la renta de nueve puntos lograda en el partido de ida disputado en Algeciras pero afronta el encuentro como si ese duelo disputado hace ahora una semana no se hubiera disputado y el de mañana fuese un partido que arranca con los dos equipos igualados. Esa idea, la de afrontar el partido sin pensar en los puntos que tiene de ventaja ha sido la que ha estado trabajando durante toda la semana Pau Tomàs junto a su cuerpo técnico de cara a lograr que el equipo salte a la pista concentrado desde el minuto uno para lograr el objetivo de pasar de ronda y estar presente en los cuartos de final de las eliminatorias.
Los mallorquines saben de la dureza del encuentro de mañana y de la fortaleza de un Damex UDEA Algeciras que ya demostró en la idea ser un rival muy correoso que puso en problemas a los de Tomàs en varias fases del encuentro. El técnico mallorquín, de cara a este partido, no va a poder contar con la presencia de Manel Signes que será intervenido en los próximos días ni tampoco de un Dante Lombardi que ha abandonado el equipo por motivos personales regresando el pasado viernes a Estados Unidos.
En lo que respecta al rival, el conjunto entrenado por Javi Malla llegará a Palma con la idea clara de voltear la eliminatoria y de darle un disgusto a la afición del Fibwi Palma en Son Moix. Jugadores como Miki Ortega o Javi Marín dieron muestras sobradas de su talento en el partido de ida en Algeciras y mañana volverán a ser piezas claves del equipo andaluz en su lucha por pasar a la siguiente ronda en un Son Moix que presentará una gran entrada y que, además, estrenará, en un partido del Fibwi Palma, los nuevos marcadores instalados durante las últimas semanas por el IME en el polideportivo mallorquín.
