El primer mes del 18 no ha cambiado, momentáneamente, la dinámica irregular de las últimas semanas del Año Viejo. El Real Mallorca sigue empatando (cinco consecutivos) y el Atlético Baleares sigue sin ganar (cuatro empates y seis derrotas seguidos). Tampoco sirvió de nada el parón liguero en Navidad para reorganizar y recuperar plantillas,y sobre todo, incorporar nuevos futbolistas. Estos nuevos jugadores todavía no han encontrado su sitio en el equipo.
El conjunto de Vicente Moreno incorporó hace días a un nuevo jugador, Alvaro Bustos, extremo zurdo. Debutó ante el Peralada, para tener el honor de seguir empatando con sus nuevos compañeros ante un equipo en zona de descenso.
El Baleares tampoco consigue variar su larga y mala racha de resultados. Los blanquiazules se plantaron en el campo del segundo clasificado, el Villarreal B, con más miedo que vergüenza. Y así acabaron, palmando por goleada (3-0). Y eso, que su ¨nuevo¨ técnico, Horacio Melgarejo, efectuó cambios de jugadores titulares en el once e hizo debutar a las dos nuevas incorporaciones: Alberto Castaño “Canario” y Hugo Díaz (ambos delanteros). Nada de nada. Nueva derrota.
En el caso del inquilino del estadio municipal de Son Moix, en las semanas anteriores al parón navideño, fue decayendo en su fortaleza fisica, mental y goleadora en los terreno de juego y a pesar de no encajar una derrota, fue empatando partidos que tenía o medio ganados, o medio perdidos. Ello le ha supuesto pasar de tener una ventaja de 14 puntos, si catorce, sobre el segundo clasificado, a los 5 de ahora mismo. No está mal que en la jornada 20 se lleven esos puntos de ventaja. Porque al Mallorca no hay que exigirle que gane la liga, lo que se le exige por presupuesto e historial, es subir a Segunda A. Otra cosa será y sería un rotundo fracaso. Se necesitan más fichajes.
En Son Malferit está mucho peor la situación. La derrota de Villarreal colocó al equipo blanquiazul con 18 puntos empatado con otro conjunto que abre la zona de descenso a Tercera. Ufff... La cosa pinta mal, muy mal. Dicen que ahora las cosas se hacen mejor que en pretemporada y en la época del anterior entrenador. Pero desde que a éste se le echó, de 12 puntos disputados, sólo se ha conseguido uno. Con la llegada de los dos delanteros no se arregla el desaguisado del verano. Hace falta mucho más para evitar un desastroso y puede que dramático descenso a Tercera.
Quedan 18 jornadas para que mallorquinistas y balearicos consigan sus respectivos objetivos. Se puede y se debe lograr.