Aquel domingo 25 de abril de 1999, el antiguo Es Fortí registró una gran entrada. La comunión entre el equipo y la afición era total. Además, los de Cúper no podían relajarse pues estaban inmersos de lleno en la lucha por la Champions, una competición que aquella temporada disputó el Athletic debido su condición de subcampeón de Liga.
Dirigidos por el internacional francés nacido en Tarifa, Luis Fernández, los bilbainos buscaban sumar en Palma un triunfo que les permitiría continuar con sus opciones UEFA. Ante la sorpresa general, los rojiblancos saltaron al césped luciendo unos pantalones verdes nada discretos. Una medida de urgencia motivada por la prohibición del colegiado Fernández Marín, que no permitió a Los Leones utilizar sus calzones negros habituales al coincidir con los nuestros. Por el lado barralet, destacar la baja de Siviero. Una ausencia que provocó un "efecto dominó" en el once. Así, Olaizola dejó el lateral derecho para cubrir el hueco dejado por el argentino mientras que Lauren retrasó su posición dando entrada a Chichi Soler como interior diestro.
El encuentro fue un auténtico monólogo de los locales, quienes avasallaron a su adversario desde el primer momento. En el minuto 2, un gran servicio de Stankovic permitió a Biagini adelantar a los isleños. Luego, Dani, el goleador agentino y el asistente serbio pudieron incrementar la renta de los de rojo y negro. Las buenas intervenciones del meta visitante lo evitaron. Por su parte, en el primer acto los de San Mamés tan solo inquietaron el arco defendido por Roa en un remate de Javi González que Marcelino salvó bajo palos y dos disparos desviados de Urzaiz y Carlos García.
Al filo del descanso, otros dos goles de Biagini -en ambos asistido desde la izquierda de Jovan Stankovic- dejaron el choque visto para sentencia. Un hat trick que el argentino logró tres días después de firmar el tanto del triunfo ante el Chelsea con un testarazo tras un córner botado por el serbio. Cuatro goles en cuatro días y todos ellos, en la misma portería y con el mismo pasador. Caprichos del destino.
En la segunda mitad, Ibagaza anotó el cuarto. Sin duda, el más bello de aquella primaveral tarde. El mediapunta se deshizo con habilidad de sus rivales, rindió tributo a su apodo ("Caño") para dejar en evidencia a Ríos y batir a Imanol. Un golazo que llenó el estadio de pañuelos blancos (en nuestro caso eran hojas de periódico) y que el argentino perpetuó con una inolvidable celebración. Poco después, Larrazábal transformó un inexistente penalty supuestamente cometido por Engonga sobre Urzaiz. Eso sí, luego no sacó el chupete.
Pasada la hora de juego, Marcelino conectó un testarazo en un saque de equina para anotar la quinto. Finalmente, Dani completó una goleada que incluso pudo ser mayor si la madera no hubiera repelido sendos remates de Carreras y Paunovic.
Destacar que durante nueve años -hasta el 7-1 al Recreativo en 2008- esta fue la mayor goleada conseguida por el RCD Mallorca en la máxima categoría. Para los curiosos, comentar que en el cuadro vasco fue titular Nagore -mallorquinista temporadas más tarde- y suplente un Ezquerro que el curso anterior había cuajado una gran segunda vuelta en Palma.
ALINEACIONES:
RCD MALLORCA (6): Roa, Lauren, Olaizola, Marcelino, Miquel Soler, Engonga, Chichi Soler, Stankovic (Carreras, min 72), Ibagaza, Biagini (Paunovic, min 70) y Dani (Luque, min 86).
ATHLETIC CLUB (1): Imanol, Lacruz, Rios, Ferreira, Larrazábal, Carlos García, Julen Guerrero (Lasa, min 70), Alkiza (Ezquerro, min 72); Nagore, Javi González y Urzaiz (Patxi Echavarría, min 72)
COLEGIADO: Fernández Marín (colegio valenciano)
GOLES: 1-0 Biagini (min 2); 2-0 Biagini (min 41); 3-0 Biagini (min 45); 4-0 Ibagaza (min 55); 4-1 Larrazábal (min 60); 5-1 Marcelino (min 62); 6-1 Dani García (min 85)