Polémica sanitaria

La Asociación del Defensor del Paciente pide a la Fiscalía investigar el funcionamiento de las Urgencias de Son Llàtzer

El hospital de Son Llàtzer, en el punto de mira
Pacientes del servicio se marchan del centro hospitalario sin ser atendidos tras más de cinco o seis horas de espera

La gerencia del Hospital de Son Llàtzer está en el punto de mira. La Asociación del Defensor del Paciente ha solicitado de forma oficial a la Fiscalía General de Baleares que inicie una investigación de oficio para analizar un posible caso de dejación de funciones en el área de Urgencias que podría poner en riesgo la vida de las personas. Son muchos los pacientes que vienen quejándose, desde hace meses, del servicio que ofrece el segundo hospital público de Baleares en el trato a los pacientes, la falta de empatía del personal con los enfermos y las largas horas de espera. 

Hace unos días, saltó una noticia en la que pacientes de Son Llàtzer se tuvieron que marchar del hospital sin ser atendidos tras más de cinco o seis horas de espera y anunciaron que están ultimado, junto a un conocido abogado de la Isla, la creación de una plataforma de afectados. Desde la Asociación del Defensor del Pacientes como los mismos enfermos indignados quieren dejar claro que bajo ningún concepto juzgan la capacitación profesional de los trabajadores allí destinados. Centran sus críticas en las largas horas de espera y la falta de empatía del personal.

Ante la avalancha de quejas, protestas y denuncias desde el IB-Salut anunciaron que el hospital está preparando un análisis pormenorizado del Servicio con metodología Lean para detectar aquellos aspectos que se puedan mejorar, pero por otra parte, también tiran balones fuera y presumen de que sus tiempos de respuesta en casos graves son muy buenos y están en la media del resto de centros de la islas. A estas quejas también se han sumado varios profesionales del sector del transporte sanitario (ambulancias) que a través de redes sociales no han ocultado su enfado por el trato que reciben en este hospital.

Son Llàtzer ya se ha visto salpicados en varios escándalos en los últimos meses. Sin duda alguna, el de mayor gravedad fue cuando en el hospital Joan March (dependiente de la gerencia de Son Llàtzer) se cometió un error médico garrafal en el que estuvieron a punto de incinerar a una anciana viva que 'resucitó' instantes antes de ser introducida en el crematorio.