Antiterrorismo vigila "muy de cerca" a los amigos de los yihadistas mallorquines

"Desde muy cerca", sin posibilidad de escabullirse, día a día, "al minuto", todos sus movimientos en las redes sociales, "monitorizados en redes sociales e internet".

Así se encuentran los amigos, compañeros, familiares y conocidos de los yihadista detenidos en Inca, Binissalem y Ariany el pasado jueves: estrechamente controlados por las fuerzas y cuerpos de la seguridad del Estado.

Recordar que uno de ellos estaba dispuesto a provocar una matanza con un cuchillo en la plaza de España de Inca.

Fuentes policiales de máxima solvencia han confirmado que la operación desarrollada en Mallorca la semana pasada consistió en "cortar de raíz" la deriva de los detenidos hacia una radicalización extrema antes de que ya fuera demasiado tarde.

De hecho, las mismas fuentes también han señalado que compañeros y amigos de los detenidos que hasta hace varios días se mostraban muy activos en las redes sociales, "ahora están calladitos".

Estas informaciones coinciden con la aparición este lunes en Inca de unas octavillas contrarias al movimiento extremista Daesh, al que presuntamente pertenecían los detenidos.

Según informan varios periódicos locales, la Guardia Civil ha señalado que "ciudadanos han encontrado en varias calles de Inca" hojas con el mensaje: "No a la sharía".

Además de este rechazo de la ley islámica, las octavillas incluyen el lema "Refugees welcome" con la segunda palabra emborronada y un dibujo de lo que parecen ser un hombre armado, una mujer con una bandera de Daesh y un niño con un chaleco explosivo.