Son Mesquidassa se adapta a los protocolos anti-Covid para seguir ofreciendo sus visitas

Ni la presencia de la Covid-19 ha conseguido hacer desaparecer las visitas a la finca y la fábrica de Son Mesquidassa, el olivar más grande de Mallorca con unas 150.000 oliveras.

Las vistas, tanto de particulares como de grupos, cuentan con todas las medidas sanitarias y de seguridad pertinentes.  Aquellos que decidan acercarse hasta Son Mesquidassa, en Felanitx, podrán conocer de primera mano todo el proceso de elaboración del aceite de oliva.

"Seguimos llevando a cabo las visitas, catas y degustaciones. Cumplimos todas las medidas de seguridad e higiene que nos marca la normativa y no superamos en ningún momento el 25 por ciento de nuestro aforo", ha asegurado Juan José Alcaide, responsable del olivar de Son Mesquidassa.

"En nuestras instalaciones pueden llegar a coincidir varias visitas al mismo tiempo. Los espacios son amplio y disponemos de diferentes rutas, por lo que no hay riesgo de que se crucen en ningún momento", ha explicado el propio Alcaide.

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