El Real Madrid de Llull y Rudy Fernández en la final de la Copa del Rey

El Real Madrid reforzó este sábado su candidatura a su vigésimo octava Copa del Rey tras destrozar, en la semifinal disputada en Málaga, a un Valencia Basket irreconocible, que se vio avasallado de principio a fin por un rival que puso en práctica un baloncesto de muchos quilates (91-68).
Tras cuatro partidos repletos de emoción en la Copa, llegó el primer enfrentamiento sin historia, resuelto antes de tiempo porque Anthony Randolph, Facundo Campazzo y Edy Tavares se encargaron de anular cualquier esperanza a un equipo taronja que pareció acusar en exceso el desgaste de su victoria de cuartos de final frente al Barça.