El tráfico en el aeropuerto de Son Sant Joan apenas llega al 13% del que tuvo la infraestructura en el mismo mes de 2019, cuando se superaron los 3,7 millones de pasajeros. El dato refleja las restricciones en las fronteras y la movilidad con terceros países.
Eivissa se sitúa en el séptimo puesto en el listado, con 275.016 viajeros, un 76% menos que un año antes; y Menorca en el undécimo, con 168.850 pasajeros, un 65,7% menos.
En cambio, en volumen de operaciones Son Sant Joan registró 8.972 vuelos en el aeródromo palmesano durante septiembre, un descenso interanual del 65,1%.
Eivissa fue el octavo aeropuerto con más vuelos (4.595, un 51,5% menos), y Menorca el 18º (con 1.940 operaciones, un 52,1% menos).
El tráfico de mercancías en avión también refleja el impacto de la crisis: en Palma se transportaron 555.514 toneladas (un 29,5% menos que el año anterior), en Eivissa 93 toneladas (-24,6%) y en Menorca, 80 (-30,9%).
A nivel nacional, los aeropuertos de la red de Aena cerraron en septiembre con 5.457.083 pasajeros, un 79,9% menos que en el mismo mes del año pasado, registrando 109.076 movimientos de aeronaves, un 50.9% menos, y 71.369 toneladas de mercancías, un 23,1% menos.
De la cifra total de pasajeros registrada en septiembre, 5.430.852 correspondieron a pasajeros comerciales, de los que 3.470.957 viajaron en vuelos nacionales, un 56% menos que en septiembre de 2019, y 1.959.895 lo hicieron en rutas internacionales, un 89,8% menos.