El consistorio ha comunicado esta semana la decisión, a través de una carta, a las diferentes asociaciones y entidades de personas migradas que participan.
En un comunicado, desde el área de Justicia Social, Feminismo y LGTBI de Palma han considerado que "se trata de un evento arraigado en la sociedad palmesana" y por este motivo estudian celebrar la feria "en un formato no presencial".
La regidora del área, Sonia Vivas, ha declarado que "es una fiesta que se ha convertido en un referente a ciudad". "Desgraciadamente lo hemos tenido que suspender, aunque desde la concejalía queremos facilitar este encuentro multicultural y fortalecer el tejido asociativo de Palma. Estamos estudiando cómo podemos poner en marcha esta feria a través de las redes sociales", ha explicado Vivas.
La concejal ha expresado su confianza en que mediante herramientas digitales puedan mantener la feria. "Hemos pedido a todas las comunidades que nos hagan llegar sus propuestas y que se impliquen para plantear alternativas a la fiesta", ha concluido.