Cada jornada, el grupo realiza una etapa de entre tres y seis horas andando, comenzando entre las 6 y las 7 y media de la mañana. Recorren varios tramos de aproximadamente entre 7 u 8 kilómetros, con paradas entre ellos de 30 minutos para descansar, hasta sumar 20 o 30 kilómetros.
Por todo eso, desde el colegio y los tutores tienen muy clara la importancia de una buena alimentación. Debe ser tremendamente nutritiva, pero también gustar a los caminantes para así servirles de motivación a la hora de continuar el recorrido.
Para contarnos cómo viven los alumnos esta experiencia, su director del Colegio San Cayetano y conductor del grupo, el Padre Pablo Guerrero, ha realizado una pequeña entrevista a su alumna de cuarto de ESO, Cati Mesquida:
-PADRE PABLO: ¿Es importante comer bien durante el Camino?
-CATI: Creo que es lo más importante porque si comes bien, y tienes carbohidratos y todas las vitaminas, podrás caminar bien y no te cansarás tanto. Cuando comes bien luego el camino se te hace más rápido y llevadero.
PADRE PABLO: ¿Cómo son las comidas que hacéis en el Camino de Santiago?
CATI: Son espectaculares. De primera calidad. El pulpo que hemos comido hoy ha sido, bueno, tremendo, irrepetible. De eso no hay en Mallorca. Y las hamburguesas están buenísimas, igual que las alitas, que hay que probarlas.