El pleno de investidura arrancó este miércoles con el discurso de Armengol, que destacó los "seis grandes retos" de esta legislatura. Tal como dijo, el primero de los grandes retos es el de llegar a un "gran acuerdo de país" para "modernizar y diversificar la economía y crecer de manera sostenible".
El resto de retos son fortalecer la arquitectura institucional, mejorar los servicios esenciales --educación, sanidad y servicios sociales--, trabajar por el acceso a la vivienda, reducir la desigualdad social y combatir el desafío climático y ambiental.
Más en detalle, la candidata a la presidencia mencionó la creación de un Observatorio de la vivienda y puso el foco en la necesidad de consensuar "una estrategia" que establezca un límite al "turismo de excesos" y defina "hasta qué punto" el actual modelo de turismo de cruceros "encaja con los objetivos" de las Islas.
También habló de conseguir la parte fiscal del Régimen Especial de Baleares (REB), la reforma del sistema de financiación, el medio ambiente, de potenciar la 'escoleta' 0-3, conseguir precios máximos en según qué rutas de avión y del impulso a la ley de consells.
En definitiva, pidió que se apoyara "un proyecto de país que beneficia a todo el mundo" y aseguró que al reeditar un pacto progresista se puede aprovechar la ocasión "para garantizar décadas de estabilidad, logrando acuerdos más amplios que nunca". "La estabilidad no se encuentra en la mayoría absoluta, se encuentra en la complicidad absoluta, en el consenso más amplio", sentenció.
Tras su intervención, los grupos parlamentarios hicieron una primera valoración del discurso, aunque será este jueves cuando puedan contestar --durante 30 minutos-- ante el Hemiciclo el discurso de la candidata.
Así, en su primera valoración del discurso, el diputado del PP balear, Antoni Costa, consideró el discurso fue "muy previsible", "inconcreto" con "vaguedades y generalidades".
La diputada de Ciudadanos (Cs), Patricia Guasp, explicó que "están trabajando ya en una oposición firme y contundente" ante el "mal pacto de Govern" y avisó de que "estarán vigilantes" porque "no quieren que PSIB, MÉS y Podemos vuelvan a secuestrar el Parlament".
El líder de Vox en Baleares, Jorge Campos, consideró que la intervención de Armengol se encamina "otra vez" a "políticas sectarias y radicales" junto a "sus socios de extrema izquierda y separatistas que quieren hundir el régimen constitucional".
El portavoz de El PI, Jaume Font, censuró la "falta de concreción" de Armengol y vinculó el voto de su formación a que en la jornada parlamentaria de este jueves se "concreten medidas", "sobre todo" las que tengan que ver con mejorar "el modelo económico".
En otro sentido, la secretaria general de Podemos en Baleares, Mae de la Concha, sostuvo que el discurso de investidura resumía "muy bien" los 'Acords de Bellver' de los Socialistas, la formación morada y MÉS per Mallorca, ya que tocó "todos los temas".
Desde MÉS per Mallorca, Miquel Ensenyat, señaló que empieza "un proceso" con un "segundo pacto de progreso que tiene muchos retos por empezar". Desde MÉS per Menorca, Josep Castells, pidió a Armengol que este jueves explique qué plan tiene para evitar que el Ejecutivo central vaya en contra, mediante sus recursos de inconstitucionalidad, de las leyes autonómicas de cambio climático y de residuos.
En la sesión de este jueves, tradicionalmente, suelen contestar a Armengol los portavoces parlamentarios, si bien el reglamento no impide que lo haga cualquier otro diputado del grupo.
Los portavoces son Biel Company (PP), Juan Pedro Yllanes (Podemos), Marc Pérez-Ribas (Cs), Miquel Ensenyat (MÉS per Mallorca), Jorge Campos (Vox), Josep Castells (Grupo Mixto) y Sílvia Cano (PSIB). Además, el Grupo Mixto puede repartirse el tiempo para que puedan participar tanto representantes de MÉS per Menorca como de GxF.
El orden de las intervenciones se decide según el tamaño de los grupos, de mayor a menor, si bien el partido del que forma parte la candidata será el último. De este modo, el primero en tomar la palabra será el PP, seguido de Unidas Podemos, y el último será el PSIB.
Armengol podrá hacer uso de la palabra tantas veces como solicite. Cuando conteste a los grupos parlamentarios, éstos tendrán derecho a una réplica de diez minutos.
La votación se llevará a cabo a una hora fijada por la presidencia del Parlament, previsiblemente, a última hora de la tarde. Antes de votar, Armengol podrá intervenir durante diez minutos y los grupos parlamentarios tendrán cinco minutos para responder fijando su posición.
Para entender otorgada la confianza de la Cámara, es necesario el voto afirmativo de la mayoría absoluta de los miembros, fijada en 30 diputados. Si no obtuviera los votos requeridos, la votación se repetiría transcurridas 48 horas y bastaría mayoría simple, pero en este caso no será necesario. Previsiblemente, la socialista logrará ser investida gracias al acuerdo entre PSIB, MÉS per Mallorca y Unidas Podemos, que junto a la diputada de GxF -formación que concurrió en las autonómicas junto al PSIB y EUIB- y MÉS per Menorca logran la mayoría necesaria.
Tras los comicios autonómicos del 26 de mayo, el PSIB obtuvo 19 diputados, Unidas Podemos consiguió seis escaños, y MÉS per Mallorca, cuatro representantes. Además, MÉS per Menorca tiene dos diputados en el hemiciclo, mientras que Gent per Formentera (GxF) tiene un escaño. Así, la suma de las fuerzas de izquierdas otorgaría 32 votos favorables a Armengol.
Una vez que Armengol haya obtenido la confianza de la Cámara, el presidente del Parlament lo comunicará al Rey y al presidente del Gobierno dentro de las 24 horas siguientes, para que se efectúe el nombramiento.
El pasado viernes, PSIB, MÉS per Mallorca y Unidas Podemos presentaron en el Castillo de Bellver el acuerdo alcanzado entre las tres fuerzas de cara a conformar el cuarto Govern de progreso en las Islas, que por primera vez reedita un Ejecutivo de izquierdas en dos legislaturas consecutivas.
En materia legislativa, el autodenominado 'Pacto de Bellver' incluye 200 puntos y prevé impulsar durante la legislatura X del Parlament una veintena de leyes, como regular el 'todo incluido' turístico dentro de una ley contra el turismo incívico, promover una ley de derecho a la información, una ley educativa y una ley de ciencia, entre otras. Además, el acuerdo prevé actuaciones en desarrollo del 'Estatut d'Autonomia' de Baleares, la Ley de Consells Insulars, la Ley de Fosas, la Ley de Vivienda o la Ley de Cambio Climático.
El acuerdo entre las tres fuerzas permitió proclamar al socialista Vicenç Thomàs como presidente del Parlament; le acompañan en la Mesa Gloria Santiago (Unidas Podemos) como vicepresidenta primera de la Cámara; Juan Manuel Lafuente (PP) como vicepresidente segundo; Joana Aina Campomar (MÉS per Mallorca) como secretaria primera; y Maxo Benalal (Ciudadanos) como secretario segundo.
Además, el pacto de gobernabilidad incluye el organigrama del futuro Ejecutivo, que constará de once conselleries, además de la Presidencia y dos secretarías autonómicas, una para promover la economía del conocimiento -sobre universidad e investigación- y otra dedicada a transparencia y mejora de la Administración Públicas.