En agosto de 1969 llegaron a La Fonda Llabrés una pareja de catalanes, Carme y Jaume, para pasar unos días en el municipio a un precio de 125 pesetas (actuales 0'75 euros) al día con pensión completa. Un municipio, que por aquel entonces era más tranquilo y sin apenas turismo.
Carme y Jaume se enamoraron de ese paraje. Y no solo de La Fonda Llabrés, sino también de la gente y de la cultura de Alcúdia. Tal es así que ya hace 50 años, que ininterrumpidamente, esta pareja pasa unos días de sus vacaciones en este Boutique Hotel que a pesar del paso de los años y los cambios en la sociedad, mantiene el mismo ambiente cercano y familiar.
Desde La Fonda Llabrés han querido rendir homenaje a esta pareja que representa el turista de calidad que busca la comunidad, que no viene solo por el sol y la playa, sino que muestra estima por la tierra y la cultura.
Hoy en día, La Fonda Llabrés Boutique Hotel ofrece 21 habitaciones modernas, toda la tecnología y el confort para asegurar a sus huéspedes una estancia inolvidable, con sabor a auténtico, un trato familiar y una ubicación inmejorable. Además, estrenan una nueva terraza chill-out con una fantásticas vistas a las bahía de Alcúdia y de Pollença.