La implantación del sistema ha supuesto una inversión de 1,5 millones de euros, aunque actualmente el sistema está en fase de pre-explotación, por lo que pasará al sistema de producción y funcionamiento durante el segundo trimestre de 2020.
La nueva tecnología implicará soluciones de automatización abiertas y gestionar de forma integrada el control de las instalaciones de generación eléctrica de todo Baleares desde el Centro de Control de Sant Joan de Déu, que dispondrá de la función de control automático de la generación así como la posibilidad de funcionar en distintas configuraciones multi-islas.
Según ha explicado Endesa, el sistema permitirá regular la potencia y la frecuencia de cada Isla garantizando la calidad del suministro eléctrico y el cálculo en tiempo real de todos los datos de producción, disponiendo también de un sistema de emergencia actualizado y la posibilidad de utilizarlo en otra ubicación, asegurando así su disponibilidad incluso en caso de catástrofes de diversa índole en la sala de operación y control del sistema principal.
El sistema de gestión de Baleares estará compartido con el de las Islas Canarias y, en el caso del archipiélago balear, se dispondrá de dos centros de control: el de Palma, ubicado en Sant Joan de Déu, que será el principal de Baleares y el sistema de emergencia para el archipiélago canario; y el centro de control de Marratxí, que será el centro de reserva y dispondrá de consolas de operación para trabajar en caso de necesidad o emergencia.
Finalmente, Endesa ha destacado que la nueva tecnología utiliza un sistema con bases de datos que permite utilizar el 'Big Data', ya que se trata de un sistema virtualizado.
