En un comunicado, han explicado que a los detenidos les imputan un delito contra la propiedad industrial, al introducir en Mallorca, a través de una empresa de mensajería, relojes que "imitan a marcas comerciales de reconocido prestigio".
A principios de mayo agentes de la Policía Local de Palma detectaron en una agencia de transporte la entrada de varias cajas sospechando que pudieran contener en su interior género falsificado.
De esta manera, procedieron a su intervención y comprobaron que en su interior, se encontraban una "abundante cantidad de relojes presuntamente falsos".
Las actuaciones fueron remitidas a la Policía Nacional, que, en el marco de sus competencias, identificó a los sospechosos y les detuvo.
Además, la investigación ha determinado que los envíos proceden de Bulgaria y Grecia, si bien se sospecha que el origen podría ser algún país asiático.