Richard Gerver: “El sistema educativo está anclado. El reto está en formar adultos capaces de gestionar la incertidumbre”
Álvaro Cabo: “El sistema actual ha fracasado. Se necesita un sistema educativo ‘real’ de calidad, libre de ideales políticos, con maestros de vocación; reconocidos socialmente, bien preparados y remunerados, y con las necesidades individuales de cada alumno atendidas”
>> El presidente de ASIMA, Francisco Martorell Esteban, resaltó la importancia de la educación y la formación en los jóvenes
“No necesitamos buenas reformas, sino buenos maestros”. Así de tajante se mostró el experto y referente mundial de innovación educativa, Francesco Tonucci, durante su conferencia en el III Foro de Educación Innovadora, organizada por la FUNDACIÓN ASIMA, y apoyada por la Obra Social “la Caixa”, la UIB y Aula Balear. Para Tonucci, “la escuela sigue siendo una propuesta válida y adecuada para pocos. Necesitamos de una escuela para todos. Una escuela capaz de aprobar y promover a todo el alumnado garantizando el mejor crecimiento para cada uno de ellos. Si alguien puede cambiar la escuela es el maestro”. En este sentido, el experto italiano explicó ante más de 1.300 personas que abarrotaron el TRUI Teatre que “la escuela debe proponer un amplio abanico de lenguajes, como prevé el artículo 13 de la Convención de los derechos de la infancia del 1989, de manera que cada uno pueda encontrar el más adecuado a sus capacidades y vocaciones”.
Para Francesco Tonucci, “se debe superar el modelo del aula para imaginar una escuela de talleres y laboratorios en los cuales se pueda reflejar la vida real y las varias inteligencias y vocaciones de los alumnos”. Tonucci entiende que “todos estos cambios no se pueden realizar cambiando una ley o proponiendo una reforma por buena que sea. Las leyes no son capaces de modificar las prácticas. La verdadera y eficaz reforma educativa sería garantizar a cada alumna y cada alumno un buen maestro. Un maestro capaz de aprobar a todos y colaborar con las familias. Por lo cual el tema hasta ahora ignorado es: ¿cómo formar buenos maestros? Por otro lado, también se mostró contrario a los deberes. “Son un abuso. Si el profesor ha dado bien la lección, no hace falta comprobar que lo han entendido. Los deberes impiden a los niños vivir el tiempo libre en el que se podrían producir las aportaciones de los propios menores a la escuela”.
Richard Gerver: “El reto está en formar adultos capaces de gestionar la incertidumbre”Por su parte, el británico Richard Gerver, considerado uno de los líderes educativos más innovadores e inspiradores de nuestro tiempo, explicó que “la educación es el factor más importante y determinante del futuro para nuestros hijos” y apeló a la colaboración entre docentes, familias y responsables políticos para desarrollar un sistema que prepare a nuestros jóvenes para un futuro “porque actualmente está anclado”. Para Gerver, la creatividad, la innovación, la autoconfianza, la independencia, la comunicación, y las ganas de descubrir y la motivación tienen que ser las competencias que desarrollen las escuelas. “El reto está en formar adultos capaces de gestionar la incertidumbre”, aseguró.En este sentido, criticó que la escuela actual está menospreciando el enorme potencial de sus alumnos, de lo que hacen y de lo que saben.
“No se tienen en cuenta sus intereses cuando serán ellos en los que deberás confiar para solucionar las futuras crisis de la sociedad. Se debe tomar conciencia de que tus alumnos parten de un potencial enorme, son la generación más preparada de la historia y por eso, más que nunca hay que valorarles a ellos por lo que son, por las experiencias que viven y por la cultura en la que están inmersos. Sólo valorando a tus alumnos serás capaz de sacar lo mejor que llevan dentro”, matizó.
Álvaro Cabo aboga por la despolitización de la educación
Después le tocó el turno a Álvaro Cabo, que pese a su temprana edad, tan sólo 13 años, tiene claro que “el sistema educativo actual está obsoleto y todo indica que ha fracasado”. “El desafío más importante al que se tiene que enfrentar el nuevo Gobierno en esta legislatura es la mejora de la educación. Y en este desafío debe entrar la educación en la diferencia, en la equidad y en la igualdad, porque si no, estaría mal llamada educación de calidad. El cambio tiene que llegar por sustituir la rígida y anticuada mentalidad de "yo hablo y tú me escuchas", a una emprendedora, en la que todos podemos aprender de todos, explicó Alvaro.
Para el joven, abogó por la “despolitización total” de la educación, como ocurre en otros países europeos y defender “una educación igual para todos los españoles”. “Un sistema educativo ‘real’ de calidad sería libre de ideales políticos, con maestros de vocación; reconocidos socialmente, bien preparados y remunerados, y con las necesidades individuales de cada alumno atendidas”, aseguró.
Alvaro Cabo recordó el valor de la vocación para reclamar que una persona que se dedique a la enseñanza tiene que “tener vocación, estar motivada y dispuesta a afrontar los nuevos retos que le vayan surgiendo”. Al igual que se busca la excelencia en los alumnos, también se debe buscar en los profesores. En su opinión, “ellos también tienen el deber de trabajar duro para ganarse la aprobación y admiración de su alumnado en particular, y de la comunidad en general. No me gusta oír de la boca de un profesor que "él ya lo tiene todo hecho". El reciclaje y la preparación tendrán que jugar un papel fundamental. No se trata solo de enseñar, sino de ayudar a aprender, el trabajo en el aula debe ser grupal, no individual; el profesor no debe decir al alumno lo que debe pensar, sino ayudarle a que piense por sí mismo”.
Por último, recalcó que un nuevo sistema educativo tiene que formar al profesorado para que “pueda medir en su alumnado la creatividad, la iniciativa, el compromiso, el entusiasmo, la capacidad de liderazgo, las habilidades tecnológicas, la adaptación al trabajo en equipo, la capacidad de desenvoltura en la vida real y -ni que decir tiene-, que deben tener en cuenta nuestras propuestas y contribuciones. Habrá que crear nuevas asignaturas y nuevas formas de evaluación, hay que evolucionar, enseñando a pensar con espíritu crítico para ser los arquitectos de nuestras propias vidas”. “Nadie debe quedar descartado ni por razones intelectuales ni económicas, porque entonces no sería ni igualitario ni equitativo. El talento no entiende de clases sociales, las oportunidades sí; esas son las que hay que retocar para que a ellas podamos acceder todos por igual”, concluyó.
Casos de éxito
El turno para los casos de éxito de Mallorca lo pusieron la experiencia del CEIP Son Serra, en Palma, Premio Nacional de Educación en “Mejora del éxito educativo”; la del CEIP Rosa dels Vents, plan de mejora pedagógica: escuelas activas; y el programa de la Escoleta ASIMA, de Bellas Artes y educación por ambientes.
La directora del CEIP Rosa dels Vents en la Colonia de Sant Pere explicó que “el trabajo por ambientes supone una nueva manera de organizar tiempos, espacios, maestros y alumnos”. El Ceip Rosa dels Vents propone que el acceso a los diferentes contenidos curriculares se haga a través de espacios preparados, talleres y proyectos de investigación individualizados en un marco de educación viva y activa ya que es a través de lo que se vive y experimenta que se aprende de manera significativa.
Para ello, “nos apoyamos en las investigaciones realizadas en el ámbito de la neurociencia, en las bases biológicas de la educación y en la confianza en los canales naturales de aprendizaje”, dijo Esther Zarrias, quien entiende que “debe darse un cambio metodológico porque lo que hay está obsoleto y queremos tender hacía una calidad educativa. Pero el Ceip Rosa dels Vents va más allá de un mero cambio metodológico”.
El Ceip Rosa dels Vents apuesta por un cambio de mirada: un giro hacia la infancia. “Queremos devolver el protagonismo a los niños, hacerlos dueños de su propio proceso de aprendizaje y nosotros, los adultos, cómplices en este empeño. Este cambio de mirada debe pasar por una profunda revisión del papel del maestro, del lugar de la infancia y el objeto mismo de la educación. Y debe pasar también por el respeto y la confianza: hacia los diferentes ritmos de aprendizaje de los niños, hacia las individualidades intrínsecas de cada uno, hacia las propias necesidades, hacia a uno mismo, hacia el otro”, explicó Esther Zarrias.
Por otro lado, la directora del CEIP Son Serra, Ana López, resaltó la importancia de haber conseguido ser Premio Nacional de Educación ya que ha servido para reconocer la calidad de la enseñanza pública, ampliar y mejorar la oferta educativa en la educación pública de nuestra comunidad así como darle visibilidad y reconocer que innovar es inherente a enseñar y que la innovación depende básicamente de las personas.
Por otro lado, el jefe de Estudios de Música, Marc Torres, explicó que ser centro integrado de música tiene por objetivo facilitar al alumnado la realización de las enseñanzas de música, infantil y primaria en cuanto curriculum, horario y espacio. “No se trata de llevar los niños a la música, sino de llevar la música a los niños”, matizó. Para Marc Torres, “este modelo es un gran reto que permite un contexto amplio y abierto de posibilidades educativas permitiendo trabajar transversalmente contenidos de todas las áreas favoreciendo el desarrollo de la creatividad y participación de todo el alumnado”. En este sentido, aseguró que “cada año se programa el proyecto anual de centro que culmina en un concierto donde actúa todo el alumnado del centro representando varias cantatas y que se lleva a cabo mediante las formaciones de coro y orquesta. Entendemos la música como integradora de todos los aprendizajes ya que estructura el pensamiento, favorece desarrollo de las competencias, socialización, autoestima, esfuerzo…”. Los alumnos tienen clases individuales y colectivas de instrumento, lenguaje musical además del coro y la orquesta que actúan elementos cohesionadores del centro son ya que permiten la socialización y participación colectiva de todo el alumnado.
Por último, la directora pedagógica de la Escoleta ASIMA, Angela González, explicó cómo se han sumado este curso a la educación por ambientes para desarrollar mayor autonomía y potenciar las relaciones entre iguales. Para Angela Gónzalez, “los ambientes fomentan actividades espontáneas entre los más pequeños a través del juego, la experimentación y las relaciones. El equipo de profesionales de la Escoleta ASIMA ha estado trabajando durante los últimos meses en construir ambientes, espacios de encuentro, cuidados y organizados, con materiales sugerentes para despertar y fomentar la autonomia y el trabajo colaborativo en los más pequeños”.
Los ambientes se construyen en paralelo al modelo educativo de las Bellas Artes, donde los más pequeños trabajan con un temario educativo elaborado por el propio centro y la escoleta se distribuye en siete aulas, y cada una de ellas representa a la música, la danza, la arquitectura, la pintura, la escultura, la literatura y el cine. Este contexto educativo que está orientado a potenciar en las niñas y los niños la sensibilidad, la iniciativa, la curiosidad, la espontaneidad, la imaginación, el gusto estético y la creatividad mediante experiencias y actividades que propicien la expresión personal a través de distintos lenguajes.