El acto, que tendrá lugar en el hotel Palace Marina de Palma de Mallorca a las 12:30, abordará la necesidad de realizar una evaluación del impacto de la Política Agrícola Común en las regiones insulares de la UE con vistas a estudiar una adaptación de los planes estratégicos que tenga en cuenta sus particularidades, como recoge la propuesta de enmienda presentada.
Las políticas de la PAC han ido evolucionando para enfrentarse a los retos globales y ayudar a los agricultores de la Unión Europea pero, desde la última reforma, tiene como objetivo ayudar a los agricultores a garantizar un suministro de alimentos de calidad a largo plazo, hacer que el sector agrícola sea más sostenible, y mantener la diversidad del campo europeo, sus tradiciones y prácticas agrícolas, siendo una política común para todos los Estados miembros y fundamental para proteger el futuro de las explotaciones y la vida rural.
Los agricultores europeos son fundamentales en nuestra sociedad y nuestra economía. Suministran a más de 500 millones de ciudadanos de la UE alimentos seguros y saludables a precios asequibles. Además, se espera de ellos que protejan el medio ambiente y garanticen la vitalidad de nuestras áreas rurales, pero la propuesta europea para las nuevas ayudas de la PAC da prioridad a los agricultores dedicados en exclusiva a la actividad agrícola, lo que para los agricultores baleares podría suponer dejar a un 86% de los agricultores que se dedican a tiempo parcial sin acceso a estas ayudas.
El pasado mes de junio, el alto cargo europeo, Ricard Ramon i Sumoy, declaró que, aunque defiende que hay que seguir ayudando a estos agricultores, “será el gobierno de cada Estado quien defina el detalle de quién recibirá las ayudas”.
Rosa Estaràs defiende la decisión del Parlamento Europeo de mantener los fondos destinados a la Política Agraria Común pero cree necesario “seguir trabajando por una PAC más equitativa, flexible y sostenible que mejore la calidad de la política agrícola de toda la Unión Europea”.