El fast ferry se está construyendo en los astilleros Armon de Gijón, según anunció ayer el presidente de Baleària, Adolfo Utor, en la conferencia inaugural del 57º Congreso de Ingeniería Naval e Industria Marítima, que se celebra estos días en València.
Capacidad e inversión
Con una eslora de 125 metros y una manga de 28 metros, el nuevo catamarán tendrá capacidad para 1.200 pasajeros y 500 turismos (o alternativamente 500 metros lineales de camiones y 250 turismos), lo que le convierte además “en el catamarán fast ferry de mayor eslora y capacidad existente en la actualidad”, explicó Utor.
El buque estará propulsado por cuatro motores Wärtsilä duales a GNL/GO de 8800 kW cada uno, que le permitirán alcanzar una velocidad de servicio de 35 nudos y una velocidad máxima superior a los 40 nudos. Además, contará con dos tanques para almacenar el gas natural licuado con una autonomía para 400 millas náuticas. Por otra parte, la proa de este innovador buque de aluminio ha sido especialmente diseñada combinando mejoras de comportamiento derivadas de las proas verticales en los cascos laterales con la incorporación de wave piercing. Cabe destacar que el diseño del buque cumple con las más exigentes normas medioambientales y de eficiencia energética.
Baleària invertirá 90 millones de euros en la construcción de este fast ferry, que está previsto que inicie el corte de aluminio el próximo mes de diciembre y que entre en servicio en verano de 2020.
Smart ship
El nuevo buque se enmarca en el concepto smart maritime que está desarrollando Baleària, consistente en la aplicación de las nuevas tecnologías, el big data y la inteligencia artificial, a través de la digitalización de buques y estaciones marítimas al servicio de la eficiencia energética y de los servicios de atención al pasajero.
Las zonas de pasaje, que permiten acomodar a 1.200 pasajeros, son espacios innovadores por su diseño y servicios de ocio y entretenimiento. Respecto a la confortabilidad de los pasajeros, se ha conseguido reducir considerablemente la aceleración vertical redundando en unas travesías más confortables, y las vibraciones y el ruido también se han visto ampliamente mejorados.
Pioneros en gas natural
"La apuesta estratégica de Baleària por el GNL responde a criterios de responsabilidad social y rentabilidad económica. El axioma menos contaminación, mayor rentabilidad económica funciona plenamente con este combustible”, señaló el presidente de Baleària, Adolfo Utor, que en su conferencia puso énfasis también en el afán innovador de la naviera.
Baleària está ultimando también la construcción de los dos primeros smart ships con motores a GNL que navegarán en el Mediterráneo. Está previsto que el Hypatia de Alejandría empiece a operar a principios del año que viene y el Marie Curie unos meses después. Además, este otoño se remotorizará el primero de un total de seis buques de la flota para que puedan navegar propulsados por gas natural licuado. La Unión Europea ha calificado recientemente como excelente este proyecto, que se llevará a cabo a lo largo de los próximos dos años, y ha otorgado a Baleària una subvención de cerca de 12 millones de euros, sobre una inversión total de 72 millones de euros.
Baleària planea tener, en los próximos tres años, como mínimo la mitad de su flota de ferries navegando con esta energía limpia, y llegar al cien por cien de la flota en un plazo de diez años.
El gas natural licuado es uno de los combustibles fósiles más respetuosos con el medio ambiente. Su uso implica la reducción de las emisiones de CO2 en un 30%, del NOx en un 35% y la eliminación total del azufre y partículas, lo que tiene un efecto inmediato en la mejora de la calidad del aire y la reducción del efecto invernadero.
Cabe señalar que la naviera viene trabajando en proyectos relacionados con el gas natural licuado desde 2012. Así, además de ser socio fundador de la Asociación Española del Gas Natural para la Movilidad (GASNAM), creada en 2013, mantiene acuerdos estratégicos con Naturgy (con quien tiene un contrato de garantía de suministro de GNL exclusivo hasta el año 2030) y con las empresas suministradoras Rolls Royce y Wärtsilä (para la construcción de motores). Por otra parte, el año pasado puso en marcha el primer generador de electricidad a GNL en un buque de pasaje, el Abel Matutes, y tiene desde 2015 un plan de formación en GNL para sus tripulantes e inspectores de buques.