Según ha informado la Conselleria en un comunicado, los dos nuevos cuerpos enteros han sido localizados en el lugar documentado como la fila uno de la fosa dos, donde las fuentes documentales situaban solo un cuerpo; un hecho que contrasta con el hallazgo de los dos cuerpos enteros encontrados, sin ataúd uno encima del otro y dispuestos boca abajo.
Uno de los dos presenta el cráneo afectado por impacto de bala y el otro cuerpo está medio afectado, de cintura para arriba, por la construcción en los años 50 de un nicho encima, de donde, además, ha salido a la luz la pierna de un tercer cuerpo.
Ninguno de los dos nuevos cuerpos localizados se puede relacionar de inmediato con ningún nombre concreto identificado de las otras trece víctimas de las catorce que se buscan y que se tiene constancia documental que yacen aún en el cementerio municipal.
Así lo ha explicado la responsable de la intervención, Almudena Garcia, a la presidenta del Govern, Francina Armengol, que ha visitado esta tarde el cementerio acompañada de la consellera de Cultura, Participación y Deportes, Fanny Tur, el alcalde del municipio, Alfonso Rodríguez, y otros miembros del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Calvià.
El único cuerpo que presumiblemente se ha identificado, a falta todavía de confirmación del cruzamiento de datos, es el cuerpo de la única mujer entre las catorce víctimas de la Guerra Civil que se tiene constancia documental que están enterradas en el cementerio municipal y que su hallazgo se convierte en la primera mujer encontrada en una exhumación en Baleares.
Juana Vaño Morales, de 50 años, fue asesinada en ses Planas, en el término municipal de Calvià, en el kilómetro 15 de la carretera Palma-Calvià y enterrada en el cementerio el 2 de octubre del 1936, según causa judicial.
Precisamente, ella y su pareja, Ramon Fuster, desaparecieron juntos a principios de aquel mes de octubre. Él fue asesinado el día 11 de octubre de aquel año en Son Pardo, en Palma, y lo enterraron en el cementerio de Palma.
De las veinte víctimas identificadas que se tiene constancia que se enterraron en el cementerio de Calvià, en la actualidad quedarían catorce, después de que seis cuerpos fueran extraídos. Sin embargo, se calcula que podría haber más víctimas.