Tras la colocación en 2014 de un conjunto de cinco grandes lampadarios colgantes en las bóvedas del templo para su iluminación general, ahora ha llegado el turno de la iluminación monumental. El proyecto ya ejecutado, y redactado por la Oficina Técnica de la Fundación Catedral Santa María, ha sido presentado hoy en un acto al que han asistido: el obispo de la Diócesis, Juan Carlos Elizalde, la diputada de Euskera, Cultura y Deporte, Igone Martínez de Luna, el director general de la Fundación Endesa, Carlos Gómez-Múgica, la directora de proyectos de la Fundación Endesa, Gloria Juste, el arquitecto y director técnico de la Fundación Catedral Santa María, Leandro Cámara, y su director gerente, Jon Lasa.
La iluminación montada en Santa María responde a la necesidad de mostrar el edificio como elemento monumental y sus bienes muebles como objeto de contemplación. Por esta razón, consta de dos subsistemas que pueden actuar de forma conjunta o separada.
El primero es el de alumbrado arquitectónico y funcional del edificio. Está formado por un conjunto de dieciocho candelabros colocados en los pilares de la catedral a una altura ligeramente inferior a la de sus capiteles decorados. Están formados por anillos de tubo de latón anclados a la piedra que sostienen cuatro luminarias en forma de antorcha. Estas luminarias tienen, a su vez, dos fuentes de luz, una dirigida hacia arriba más potente y tratada como un cirio con tulipa de cristal blanco, y la otra dirigida hacia el suelo y dotada de rejilla antideslumbramiento. Las superiores ofrecen un alumbrado general del espacio arquitectónico, y especialmente de las bóvedas de las naves, y permiten apreciar los detalles escultóricos de los pilares. Por su parte, las inferiores hacen las veces de iluminación de tránsito, pues solo iluminan el suelo de la Catedral, permitiendo la circulación en condiciones de seguridad.
El segundo subsistema está dirigido a alumbrar los elementos artísticos de la catedral, sean inmuebles (esculturas, escudos y sepulcros) o muebles (cuadros, retablos y tallas). Está organizado mediante el uso de focos colocados sobre raíles electrificados. Son orientables en cualquier dirección y pueden situarse en cualquier punto del carril para conseguir el mejor ángulo de iluminación en cada caso.
Todas las lámparas de las luminarias son de tipo LED, con bajos consumos y buenos rendimientos de color, adecuados a la arquitectura del edificio y a la calidad de los objetos a exponer.
La instalación de esta iluminación monumental ha contado con la colaboración de la Fundación Endesa, la cual ya suma más de 700 proyectos de iluminación de auténticas joyas patrimoniales y artísticas: catedrales, iglesias, museos y monumentos. Entre los mismos, el pasado año 2017 la Fundación Endesa tuvo la oportunidad de iluminar Medina Azahara, ciudad califal de Córdoba, el Museo de Arte Nacional de Cataluña y la basílica de Santa María La Mayor en Roma. Además, la Fundación Endesa ha iluminado en el País Vasco: el puente colgante de Vizcaya y tres edificios con motivo del International Meeting for Autism Resarch en San Sebastián.
En este sentido, y como se ha hecho en Santa María, aplica las técnicas más avanzadas de eficiencia energética y soluciones innovadoras, contribuyendo a una iluminación más eficiente en consumo y ahorro de energía.