Según han informado desde el Cuerpo Nacional de Policía, este lunes, una mujer acudió a dependencias policiales para denunciar los hechos. La víctima explicó que al poco de iniciar la relación, comenzaron los malos tratos, tales como insultos, golpes, vejaciones.
Tal como explicó, en una ocasión, incluso, la encerró en el gimnasio, donde él trabaja, y la golpeó por todo su cuerpo. Pudo escapar de su agresor en un momento de despiste.
Tras la agresión, la víctima acudió a un hospital de Palma y mintió al personal de las causas que le provocaron sus heridas por miedo a represalias de su pareja si conocía que la había denunciado.
De esta manera, han explicado que fue la llamada de un ciudadano la que alertó a la Policía de que se estaba produciendo un episodio de malos tratos en un gimnasio de Palma. Este se produjo a raíz de que la mujer dejó la cajetilla de tabaco en un sitio del gimnasio.
La discusión acabo dentro del vestuario del gimnasio con agresiones hacia ella, hasta que acudió una dotación de Policía. La mujer también mintió para que no lo detuviesen y evitar represalias.
A pesar de esto, este lunes, la víctima acabó por interponer la denuncia ante la Policía que detuvo al hombre como presunto autor de un delito de malos tratos y abusos sexuales. El detenido, tras haber sido puesto a disposición judicial, ingresó a prisión este martes.