Tal como se puede comprobar en el vídeo-denuncia, cientos de coches quedan atrapados en mitad de la montaña sin poder maniobrar tardando hasta una hora y media en recorrer los escasos 9 km que separan el puerto de Pollensa de la playa de Formentor. Además de la ausencia de policial local de Pollensa y de la Guardia Civil de tráfico.
La causa se debe a que una de las medidas estrella que el Ayuntamiento de Pollensa, el Consell de Mallorca y el Gobierno Balear, todos gobernados por el PSOE y formaciones separatistas, han puesto en marcha este verano para evitar la "masificación" de acceso al Faro de Formentor ha sido cortar el acceso en vehículo privado desde la playa hasta el faro, por lo que cuando los aparcamientos de la playa están completos la carretera se colapsa. El aparcamiento tiene alrededor de 400 plazas y cada día llegan a la zona entre dos mil y tres mil vehículos.
Para ACTUA Baleares, además de las molestias y la mala imagen turística, esta situación conlleva un peligro grave de seguridad ya que si se declara un incendio en el bosque, que tampoco se ha limpiado, miles de personas podrían morir atrapadas sin posibilidad de huir de las llamas.
El partido liderado por Jorge Campos considera que el fracaso de esta medida, debida a su improvisación, se une al cúmulo de políticas "turismofóbicas" que perjudican gravemente a residentes y visitantes así como a la economía de las islas.