Según ha informado Philips en un comunicado, la Consellera de Salud, Patricia Gómez, y el atleta Chema Martínez, con el apoyo del servicio 061 y Philips, han sido los responsables de dar el pistoletazo de salida de este "récord de RCP multitudinario".
Casi un millar de personas han realizado la maniobra en simultaneo para sensibilizar sobre las enfermedades cardiovasculares y la elevada incidencia de casos de paro cardiaco súbito. Cada año se producen en España más de 24.000 paradas cardíacas, con una supervivencia del 5%.
Martínez arrancó la iniciativa con una carrera solidaria desde las Ramblas de Palma hacia el velódromo del Palma de Arena, portando un desfibrilador semiautomático, una tecnología que, junto con la RCP es capaz de salvar vidas en caso de paro cardíaco súbito. La carrera se realizó en menos de diez minutos, el tiempo máximo que debería transcurrir desde una parada cardiorrespiratoria hasta la desfibrilación.
Mientras Palma se prepara para la entrada en vigor de un nuevo decreto que impulsará la cardioprotección en Baleares, afianzando su compromiso con la reducción del riesgo de mortalidad por paro cardiaco, el servicio 061, junto con el atleta Chema Martínez, impulsan la educación y la sensibilización ciudadana con un evento donde cientos de personas aprendieron a activar la cadena de supervivencia y a prestar auxilio en casos de emergencia cardíaca.
Según la consellera de Salud, "un paro cardiaco puede ocurrir en cualquier lugar y es muy importante saber lo que hay que hacer, que en tus manos está salvar la vida de una persona".
Por su parte, Chema Martínez comentó a los numerosos niños que participaron en el récord que "en sus manos también está la posibilidad de salvar una vida" y por eso destacó "la importancia de la cardioprotección en espacios públicos y de la educación en RCP desde la misma escuela".
Cada año se producen en España más de 24.000 paradas cardíacas, con una supervivencia del 5%. En el mundo del deporte, profesional o amateur, muere una media de 120 personas al año por esta causa en nuestro país.
De acuerdo con el consenso sobre instalación de desfibriladores en espacios públicos, elaborado por el Consejo Español de Resucitación cardiopulmonar y la Fundación Gaspar Casal, la desfibrilación es la única intervención eficaz que existe para tratar el paro cardíaco.
Un acceso rápido a la desfibrilación podría aumentar las probabilidades de supervivencia en 3 de cada 4 casos de paro cardíaco repentino. Las características de los actuales desfibriladores, automatizados y seguros, junto a su demostrada utilidad en la cadena de resucitación, ha motivado que la comunidad científica recomiende en su conjunto la difusión e implantación de esta tecnología en áreas de acceso público, si bien no existe una normativa armonizada al respecto en el conjunto del territorio español.