Según el escrito del fiscal, el acusado, de nacionalidad ecuatoriana concertó una cita con la menor, a la que había conocido a través de Instagram, en la casa de la chica.
En enero de 2017, el joven acudió a la casa de la menor, aprovechando que no estaban sus padres, y se fueron a su habitación. Una vez ahí, la chica dijo expresamente que no quería mantener relaciones sexuales pero el acusado hizo caso omiso y penetró a la víctima de forma vaginal y anal.
Además de los nueve años de cárcel, la Fiscalía solicita una orden de alejamiento de 500 metros y de incomunicación durante siete años, así como siete años de libertad vigilada. Igualmente, pide que indemnice al representante legal de la menor con 4.000 euros por los daños morales ocasionados.