Las pesquisas sobre el accidente tomarán tiempo y es "probable que no tengamos información nueva dentro de algunas semanas", explicó el miércoles Kathleen Mckinney, portavoz de la FHP. "Pueden transcurrir varios meses antes de que se obtenga toda la información", agregó Mckinney.
El reporte, señaló la portavoz, incluirá el resultado del informe de la oficina del forense del condado Monroe, donde se encuentran aún los cadáveres de las mallorquinas Teresa Sánchez Quetglas, de 30 años; María López-Bermejo Roselló, de 31, y Margarita Cortés-Pardo, de 31, y la cordobesa Ana Gaitán Díaz, de 31.
Mckinney explicó que las familias podrán reclamar los cuerpos de las cuatro españolas una vez que el médico forense "haya completado su investigación" sobre sus muertes.
Según el informe oficial, testigos presenciales explicaron que el automóvil en el que viajaban las españolas aparentemente intentó hacer un giro en la carretera y el camión que las seguía, que transportaba inodoros portátiles, no pudo detenerse a tiempo. El accidente ocurrió en la carretera US1, que une el archipiélago de los Cayos de Florida con la ciudad de Miami.
El impacto trasero que sufrió el Nissan Rogue en el que viajaban las españolas lo empujó al carril contrario, donde chocó con una autocaravana y, posteriormente, con un árbol. Las españolas fallecieron en el lugar del accidente.
El conductor del camión, Carlos Manso, de 30 años y residente local, y el de la autocaravana, Daniel Pinkerton, procedente de Alaska, fueron atendidos de lesiones menores en un hospital cercano.
Según las autoridades, las cuatro españolas llevaban el cinturón de seguridad, así como el conductor de la autocaravana, de 62 años, que dio negativo en las pruebas de alcoholemia.
El informe del accidente, no indica si Manso dio positivo en el control de alcoholemia o si llevaba el cinturón de seguridad.