Sin embargo, 30 años después, el ensanchamiento de los arcenes de la carretera ha permitido descubrir 21 tumbas más que datan del siglo X. Según los arqueólogos estos cuerpos formaban parte de una necrópolis rural islámica de la 'Menorca Andaluza', donde las familias de labradores enterraban a sus propios muertos. A pesar de conocer estos datos, todavía no hay constancia de la zona exacta donde habitaban.
Los trabajos de recuperación del patrimonio se alargarán hasta mediados del mes de febrero, y una vez finalizados, los restos se trasladarán al Museu de Menorca. Por otro lado, desde la institución insular han asegurado que estas apariciones no han afectado ni afectarán a las obras que actualmente se están llevando a cabo en la principal carretera de Menorca.