Ante esa negativa, y dado que el PP contaba con la condena judicial por la Operación MAPAU, mediante la que transfirió votantes CERA controlados desde fuera de España a una circunscripción pequeña para ganar mediante ese fraude un diputado que podía ser decisivo, los que estuvimos trabajando en la investigación y posterior denuncia de las irregularidades seguimos sospechando que para el 20-D/2015 podría haberse organizado una maniobra similar en Castilla y León concentrando, a efectos de recuento y en León, los votos CERA que correspondían a las otras provincias.
De aquella movida siguen pendientes varias demandas. Entre otras, se está reclamando al Gobierno que publique en Internet todas y cada una de las actas electorales de todas las urnas que se convoquen, y no solo los acumulados, que es lo que se hace ahora. Comenzando por las del día 21 en Catalunya. La petición está liderada por la asociación Convocatoria Cívica en la plataforma Change.
No publican las actas porque no quieren. Pero sería la única manera de cortar de raíz las sospechas de pucherazos y otras irregularidades. Si lo hicieran, cualquier persona podría realizar toda clase de comprobaciones y recuentos. Además, se facilitaría la función de control que, por interés legítimo y en bien de la democracia, tienen los partidos políticos. También se ayudaría a los investigadores sociales en el análisis de la demografía y los resultados electorales.