Según ha informado en un comunicado la Xarxa per a la Inclusió Social EAPN-Illes Balears, estas cifras evidencian que los "supuestos brotes verdes de la economía no llegan a todos los grupos de la población". Precisamente, las Islas presentan la tercera tasa más alta de pobreza extrema del país, únicamente por detrás de Andalucía y Canarias.
Por otro lado, este informe revela que el 7,7 por ciento de la población, casi 85.000 personas del archipiélago, viven en situación de privación material severa. Así, unas 41.000 personas no pueden comer al menos dos veces a la semana carne o pescado; 444.000 no tienen capacidad de afrontar gastos imprevistos; más de 230.000 personas tienen retrasos en el pago de sus hipotecas o alquileres; y más de 81.000 personas no pueden mantener su vivienda con una temperatura adecuada.
La Xarxa per a la Inclusió Social también subraya que el 8,4 por ciento de la población de menos de 60 años, más de 74.000 personas, vive en hogares con "baja intensidad de trabajo" de Baleares. En este sentido destaca que "actualmente tener un trabajo no quiere decir salir de la pobreza, dado que la ocupación laboral que se está generando en estos momentos es de peor calidad que antes de la crisis".
Así, remarcan que actualmente se ha generalizado la categoría laboral de los trabajadores pobres y que hace referencia a todas las personas que tienen un empleo precario, temporal e inseguro. Por tanto, "se constata un aumento de la desigualdad entre ricos y pobres en nuestra sociedad".
En relación al resto del país, indican que 13,5 millones de personas viven en riesgo de pobreza y exclusión social, de las que más de 3,5 millones sufren pobreza extrema.
Además, más de uno de cada tres niños sufre miseria y, en ese sentido, destacan la "difícil situación" que las familias monoparentales con uno o más niños dependientes. Actualmente, más de la mitad de las personas que vive en hogares monoparentales está en riesgo de pobreza o exclusión.