Los representantes de las diferentes asociaciones han expresado al alcalde su preocupación por la aplicación de la ley turística dado que "la economía de Pollença se sustenta por el alquiler de viviendas turísticas", según ha explicado el portavoz de la AVPP y presidente de los empresarios de villas, Miquel Cifre.
Los comerciantes y restauradores constataron la importancia de no restringir ya que "si se hace una restricción muy fuerte el comercio quedaría reducir a nada. Aquí no hay grandes hoteles y si esto se restringe mucho nos afectará al comercio", explican.
Por su lado, los vecinos de Cala Sant Vicenç pusieron sobre la mesa la problemática tiene este núcleo costero, el más deprimido de término, donde una restricción pondría en peligro su "supervivencia".