Abril no se ha desdicho de las declaraciones que realizó este lunes en rueda de prensa en las que calificaba de "neofascista" la cumbre que celebrará el PP en Palma el próximo sábado con la presencia del presidente nacional, Mariano Rajoy.
En declaraciones en los pasillos del Parlament, minutos después de que Company le pidiera que "se vaya a su casa", Abril se ha reafirmado: "Cuando hablé de la cumbre que encabezará Rajoy no buscaba ningún titular, sino que intenté ser lo más objetivo posible".
En este punto, el parlamentario ha señalado que al consultar la definición de Historia en un manual de Historia "se encontrarán una apelación demagógica y permanente a la unidad nacional y elementos de segregación y diferenciación poblacional que es lo que practica el PP cuando quiere, por ejemplo, que miles de personas queden desasistidas en materia sanitaria o cuando se cargan la separación de poderes utilizando la Fiscalía para ir en contra de los adversarios políticos o el Tribunal Constitucional como un brazo armado".
"A ello hay que sumar que el PP es el único de Europa que dentro de la derecha ni siquiera ha sido capaz de condenar los 40 años de Franquismo y que convoca una cumbre en Palma para alardear de todo eso, pues no sé si el adjetivo correcto era fascista, neofascista o posfascista, pero creo que más objetivo no podía ser por mi dimisión", ha manifestado al respecto Abril.
"Dimitir por eso, pues que espere el señor Company sentado", ha espetado Abril, quien ha insistido en que "el día que yo vea que piden la dimisión de Álvaro Gijón, por temas más graves que esto que estamos comentando, y de Mabel Cabrer, cómplice de Jaume Matas que está siendo juzgado esta semana, y que piden perdón a esta tierra por todo lo que han robado y todo el mal causado, aquel día yo dimitiré y me iré contentísimo a mi casa por el trabajo hecho".
