Pasadas la 17.00 horas, se recibía un aviso en el que se comunicaba que una pareja de escaladores se había quedado atrapada a 250 metros de altura, sin poder subir ni bajar, al haberse quedado enganchada la cuerda que utilizaban para poder avanzar.
Por ello, un equipo del Greim se trasladó en helicóptero hasta el lugar para su rescate.
Debido a la verticalidad de la pared, la oscuridad de la noche y al tratarse de una zona de difícil acceso, se realizó un apoyo parcial de la aeronave para dejar a los especialistas.
Tras colocar unas cuerdas, los rescatadores del Greim se descolgaron hasta los escaladores y los sacaron hasta la cumbre, donde esperaban los bomberos.