El director técnico de la red para la Inclusión Social- EAPN Balears discrepa en cómo se ha llevado a cabo la aplicación del conocido como programa “Lloguer segur”.
Andreu Grimalt reconoce que eran partidarios de que la administración diera garantía a aquellos propietarios que tenían una cierta reticencia a poner en el mercado sus viviendas, ya sea por tema de impagos o por miedo a sufrir desperfectos, si bien se opone a que se continúe manteniendo esta escalada de precios.
Destacar que los gastos en vivienda, en teoría, no deben superar el 40% de los ingresos netos de una persona. Por lo que Grimalt detalla que para poder asumir un alquiler de 1.050 euros, que es el precio máximo establecido por el programa en las islas de Mallorca y Menorca, el inquilino debe tener un salario mensual de alrededor de 2.600 euros.
Recalcar que cuando nos referimos a personas vulnerables no solo hablamos de aquellas que se encuentran en situación de pobreza sino también a aquellas que perciben unos ingresos menores a 900 euros al mes o simplemente que el coste de la vivienda no les permiten desarrollar un proyecto de vida digna. Teniendo esto en cuenta, este programa y los precios que se contemplan en él, no esta dando respuesta a los más jóvenes.
Por otro lado, Grimalt destaca que existe una Mesa de la Vivienda impulsada por el Govern. El director técnico de la red para la Inclusión Social crítica que se están tomando decisiones vía decreto sin estar consensuadas previamente con los agentes sociales económicos y la sociedad civil.
Por cierto, está previsto que próximamente se convoque dicha la mesa.
