Se trata de una reivindicación histórica de los restauradores, que ahora se convierte en una prioridad ya que se encuentran en una situación límite con una caída de un 20% de la facturación esta temporada.
En otras regiones de España como La Rioja, la Comunidad de Madrid o Guipúzcoa a nivel provincial, este convenio propio de la restauración ya es una realidad. Desde Pimem-Restauración denuncian que la difícil situación que padecen se debe especialmente a tres causas: la falta de personal cualificado, el incremento de los costes de plantilla y de actividad, y una bajada en las ventas.
Concretamente, este verano la facturación del sector de la restauración ha caído alrededor de un 20% en relación al año pasado. A todo ello, hay que añadirle que el actual convenio fija que en 2025 tiene que producirse un incremento salarial del 5%, un aumento que, el presidente de Pimem-Restauración, califica de inasumible. Para César Amable el convenio de hostelería actual es un documento centrado en la realidad hotelera, de ahí, la necesidad de tener uno propio.
Según ha explicado César Amable el convenio colectivo ha incrementado un 25,3% los gastos en plantilla desde 2018, mientras que el precio de los menús ha subido un 10% en el mismo periodo. El presidente de la patronal de la restauración ha anunciado que elaboraran un informe técnico para defender la obtención de un convenio propio.
Amable también ha señalado que la caída de la facturación esta temporada se traducirá en el cierre anticipado de algunos negocios ubicados en las zonas turísticas de Mallorca.