A finales de julio, se ordenó el desalojo de dos edificios con más de veinte viviendas en la calle Blanquerna debido a un posible derrumbe. Hasta la fecha, los inquilinos no han podido regresar a sus hogares, ya que el daño estructural en los edificios aún no ha sido reparado.

Hace aproximadamente una semana que se trabaja en la zona cero del suceso, es decir, en la peluquería donde se produjo el hundimiento del suelo. Un incidente que pilló por sorpresa a muchos de los vecinos del edificio que en ese momento se encontraban fuera trabajando como es el caso de Nicolás, vecino afectado, que comparte su testimonio con Fibwi Televisión. Nicolas comparte piso con Alejo, y ambos esta mañana se han acercado al edificio por si podían recuperar algunas de sus pertenencias, ya que la mayor parte de ellas siguen dentro de las viviendas. 

Si bien, en estos momentos no hay un plazo estipulado para que puedan regresar a sus domicilios, estiman que sea en un plazo estimado de  un mes.

Tanto Nicolas como Alejo ponen en valor el trabajo del Ayuntamiento de Palma, que está en contacto permanente con las familias además de poner a disposición de las que lo necesiten recursos municipales. Técnicos del Ayuntamiento de Palma continúan trabajando en los dos edificios que se han visto afectados este martes por un hundimiento del suelo en las calles Blanquerna y Guillem Massot, con el objetivo de que los 14 vecinos realojados puedan volver a sus casas "cuanto antes posible".

Según ha señalado el Consistorio, no hay un plazo estipulado para que los vecinos puedan regresar a sus domicilios pero "se intentará que sea en el plazo más breve". Así, ha explicado que los técnicos de Urbanismo están haciendo las comprobaciones pertinentes y que, cuando se determine que no hay riesgo de desplome, los vecinos podrán volver.

Así, los técnicos municipales continúan trabajando, puesto que todavía no hay un informe definitivo, para determinar las causas exactas del siniestro y concretar cuál tiene que ser el procedimiento a seguir para resolver las deficiencias.

Los vecinos no podrán regresar a sus viviendas hasta que se repare el daño estructural, ya que se compromete la estabilidad del edificio. El Ayuntamiento está en contacto con las familias para determinar cuántas de ellas van a precisar de recursos municipales durante los próximos días.