La prolongada sequía, la falta de precipitaciones y el aumento del consumo han llevado a imponer estas restricciones en diferentes municipios de la Serra de Tramuntana. En el caso de Puigpunyent las autoridades municipales han instado a los vecinos a no abrir los grifos durante el periodo que se corta el suministro para evitar agotar el agua residual en las tuberías y facilitar así el restablecimiento del servicio.
Lo notable de estas medidas es que no tienen una fecha límite establecida, lo que refleja la incertidumbre y la gravedad de la situación actual. el Ayuntamiento es consciente de que la recuperación del suministro depende en gran parte de las condiciones meteorológicas y la gestión colectiva del recurso.
El municipio de Puigpunyent al igual que Banyalbufar, Esporles o Estellencs también restringe el uso de agua para limpiar viales, terrazas, patios, vehículos y para fines ornamentales o recreativos. Las autoridades locales hacen un llamado a la responsabilidad ciudadana para un uso consciente y moderado del agua, con el fin de mitigar los efectos de esta crisis hídrica en la región.