Un acontecimiento anual que, como novedad, en esta segunda edición ha adherido al Panel de Cata de la DOP Queso Mahón-Menorca, proponiendo un intercambio de experiencias y ampliando la visión y conocimiento del análisis sensorial.
La jornada, en la que han participado 35 catadores profesionales de los Paneles de Cata de la IGP Sobrassada de Mallorca y la DO Binissalem, se llevó a cabo en el Centro Sociocultural Sa Quintana de Sineu. Un acto que ha contado con la presencia del alcalde de Sineu, Tomeu Mulet; la concejal de Promoción Económica y Desarrollo Local, Xisca Ramis; el presidente de la IGP Sobrassada de Mallorca, Andreu Palou; y las directoras técnicas de la IGP Sobrassada de Mallorca y la DO Binissalem, Antonia Mª Torres y Marga Amat, respectivamente.
Antonia Mª Torres, directora técnica de la IGP Sobrassada de Mallorca, ha explicado que "hemos decidido convertir la jornada técnica de cata profesional en un evento anual debido al éxito que tuvo el año pasado y de lo provechoso que es para el grupo de catadores tanto de la DO Binissalem como de la IGP Sobrassada de Mallorca. Además, este año hemos adherido el grupo de catadores de la DOP Queso Mahón-Menorca".
Así, tras la primera sesión celebrada el pasado jueves en Menorca, Piedad Lopez, directora técnica de la DOP Mahón-Menorca, ha sido la encargada de dirigir la segunda sesión de cata de queso para los catadores profesionales de Mallorca. Una sesión en la que, de forma conjunta, Antonia Mª Torres, directora técnica de la IGP Sobrassada de Mallorca, y Marga Amat, directora técnica de la DO Binissalem, han expuesto también los últimos adelantos, desafíos y estrategias para poder llevar a cabo un correcto análisis sensorial acreditado por ENAC.
Una jornada en la que el principal objetivo es poner en valor la tarea de los Paneles de Cata profesionales de estas entidades, quienes mediante el análisis aplican una técnica de medida totalmente objetiva para conocer las propiedades de los alimentos como el color, el aspecto, el aroma, la textura o el gusto.
En este sentido, Antonia Mª Torres ha añadido que "el análisis sensorial implica una objetividad muy grande y lo que pretendemos con estas catas es que la parte sensorial del producto se trate como una analítica instrumental seleccionando y entrenando a nuestros catadores para evaluar las propiedades de nuestros alimentos con un alto grado de calidad reconocida y que nos aseguran que los consumidores encuentren en el mercado los productos tal y como esperan que sea".
Finalmente, cabe destacar que, dentro del marco de la certificación de producto, avalada por la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC) en cumplimiento de lo que establece la norma UNE-EN ISO/IEC 17025, el análisis sensorial es uno de los requisitos por los productos amparados por las Indicaciones Geográficas Protegidas (no vínicas) y por las Denominaciones de Origen.