La Asociación de Constructores de Baleares advierte de que la problemática de la vivienda en Baleares se está agravando. Aseguran que faltan unos 35.000 inmuebles y sin embargo, cada vez se construye menos. De hecho, en 2023 la construcción bajó un 7,5%, visándose 3.292 viviendas.
En concreto, los constructores denuncian que en los últimos años apenas se construye vivienda plurifamiliar a precios asequibles. El año pasado los visados de este tipo de construcciones disminuyeron casi un 10%, mientras que aumentaron ligeramente los de chalés y adosados.
En este sentido, desde la asociación advierten que en los próximos 13 años sería necesario poner en el mercado inmobiliario 10.300 vivienda al año para equilibrar la demanda y la oferta.
Asimismo, los constructores advierten que la escasez y el elevado precio del suelo imposibilita construir vivienda económica. También lamentan que muy pocos ayuntamientos se hayan sumado a las medidas del Govern.
Por otro lado, los constructores lamentan que también ha bajado en un 50% el porcentaje de viviendas de protección oficial que se han construido. Por ello, reclaman al Govern que retome la actividad y apueste por la colaboración público-privada para potenciar la edificación de vivienda a precios asequibles.
Con todo, los constructores consideran vital dar seguridad jurídica a los propietarios para que pongan sus viviendas a alquilar y reclaman que se impulsen las ayudas europeas para rehabilitar viviendas y edificios en las Islas.