La transcripción literal de las conversaciones telefónicas protagonizadas por los cerebros de la trama corrupta del Caso Koldo, conseguidas a través de intervenciones de la Guardia Civil autorizadas por la Audiencia Nacional, descubren que Baleares -como expresión del Govern balear- preocupaba a los ahora investigados y detenidos.
Recordar que el ejecutivo de Francina Armengol compró 3’7 millones de euros en mascarillas fraudulentas a la empresa Soluciones de Gestión -la tapadera de todo el Caso Koldo- y que, después, no reclamó la devolución de este dinero estafado hasta el último día de su mandato.
Mientras los portavoces del Partido Socialista, del Popular y del actual Govern polemizan sobre si se llegaron a reclamar de verdad o no estos 3’7 millones, cuándo, cómo y con que efectividad administrativa o penal se hizo, el auto del juez Ismael Moreno refleja que tanto el propio asesor del ministro José Luís Ávalos, Koldo García, como el propietario de la empresa Soluciones de Gestión, Juan Carlos Cueto, como también Íñigo Rotaeche, gestor de esta sociedad, estuvieron hablando por teléfono sobre la reclamación, o no, de Baleares pare recuperar el dinero estafado.
En una de estas conversaciones, Koldo García dice, literal, que “todo va por buen camino”, lo que da a suponer al juez instructor que la reclamación de Baleares no será efectiva y, por tanto, la empresa Soluciones de Gestión no tendrá que devolver el dinero estafado.
Además, Koldo García asegura que ya ha hablado sobre este tema con su anterior jefe, el ya ex ministro José Luís Ábalos, y que el ahora expulsado del PSOE le dijo que esta reclamación de devolución “no tenía recorrido”.
Una seguridad de impunidad que tienen los corruptos que se apoya, además, en otra conversación telefónica intervenida. En ella, el cerebro de la trama (José Luís Cueto) señala que Koldo ha intervenido a través de dos personas distintas para que el Govern balear no reclame.
Estas conversaciones telefónicas -recordemos, intervenidas por la Guardia Civil por orden judicial- dan pie a entender que la trama corrupta estableció garantías con alguien del Govern balear para frenar el proceso administrativo para recuperar el dinero pagado por las mascarillas fraudulentas.
Sin embargo, no se aclaran en el auto los nombres de estas presuntas personas del Govern que habrían asegurado esta parálisis en el procedimiento.
Las investigaciones siguen y parte del sumario sigue bajo secreto judicial.