El día ha amanecido cubierto, con nubes oscuras en el Llevant mallorquín y una bajada apreciable de las temperaturas, que se ha prolongado toda la jornada.
Todo ello ha provocado que la afluencia turística al centro de Palma haya sido muy elevada.
La Policía Local ha puesto en marcha su plan especial para jornadas como esta, tras las experiencias de otros años. Los mayores problemas se han registrado en las entradas de los aparcamientos más cercanos a las zonas turísticas, como el del Parc de la Mar, Plaza Mayor y Vía Roma.
Asimismo, la circulación peatonal en las calles más céntricas de Palma también ha sido difícil.
El momento álgido de la jornada se ha registrado al mediodía, con los bares y restaurantes del centro de ciutat con todas las mesas llenas.
También se han vivido momentos de colapso en las autopistas de acceso a Palma, especialmente la del aeropuerto-Llevant, que ha bloqueado los accesos a la Vía de Cintura.