Ese lugar ya fue investigado en el pasado, incluso con excavadoras, pero sin resutados positivos. En esta ocasión, según las primeras informaciones aportadas por la Benemérita, han aparecido restos de huesos y otros indicios orgánicos, que podrían ser del desaparecido.
Los especialistas del laboratorio de criminalística recogieron sobre el terreno -y con el apoyo de los perros especializados en seguimientos de pistas consistentes en restos biológicos- las posibles evidencias del marroquí El Karchaoui, que serán analizadas para determinar si pudieran pertenecerle.
Según las investigaciones en curso, el desaparecido estaba relacionado con actividades presuntamente ilegales y, en un primer momento, se concluyó que había desaparecido voluntariamente para evitar algún tipo de represalias por algún hecho cometido.
Sin embargo, después la investigación derivó hacia un acto criminal. De hecho, esta misma finca de Muro situada junto a la Albufera ya fue investigada, sin resultados en ese momento, lo que obligó a poner en libertad a una persona que había sido detenida presuntamente implicada en la desaparición del marroquí.
Con los restos encontrados, la investigación sigue abierta y con nuevos elementos a analizar.