La finca pública de Son Real en Santa Margalida se ha visto envuelta en la polémica. El alcalde del municipio, Joan Monjo, ha criticado la gestión del Govern advirtiendo la dejadez y falta de personal en el centro de interpretación.

Monjo ha asegurado que "lo que no puede ser es que se reduzca al mínimo la gente que vela por el centrode interpretación de Son Real" y ha añadido que "la imagen que se da es deplorable".

Unas declaraciones que sorprenden a la Conselleria de Medio Ambiente, desde donde aseguran que "Monjo tiene una obsesión compulsiva con Son Real". En concreto, el director general d'Espais Natural i Biodiversitat, Miquel Mir, ha negado las acusaciones del alcalde de Santa Margalida y ha explicado que "ha habido un compromiso importante de la Conselleria, se ha duplicado el personal en la finca pública de Son Real y no se permiten fiestas y eventos y a partir de ahora, más que nunca, podremos disfrutar todos de la finca".