Año nuevo, vida nueva. El dicho popular cobra todo el sentido en este inicio de año para el Palma Futsal en el que quiere aprovechar para romper con los resultados de la última semana del pasado año y recuperar la imagen y sensaciones de casi todo el curso. El conjunto balear estrena el año en Sevilla este domingo (12:00 horas / IB3TV) frente al Real Betis FS con el reto de dar carpetazo a las dudas generadas con las tres derrotas seguidas con las que llegó al descanso de Navidad. Pese a todo, el cuadro balear arranca como líder de la Primera División y con el objetivo de asentarse en la zona alta de la tabla una vez conseguido el billete para la Copa de España. Y para ello tendrá que superar todos los contratiempos que juegan en su contra y a los que se le unen las bajas. Diego Nunes y Ángel Claudino son los dos últimos jugadores en caer. Ambos arrastran problemas físicos, no podrán jugar este partido y se unen a Tomaz en la lista de bajas. Antonio Vadillo apenas cuenta con los diez jugadores disponibles de la primera plantilla y citó al canterano Carlos Gómez, que debuta en un desplazamiento con el primer equipo.
No será un partido sencillo. El Real Betis FS es un recién ascendido pero con una plantilla de experiencia y garantías para la mejor liga del mundo. El cuadro andaluz se juega una de las últimas plazas para la Copa de España y conoce a la perfección al equipo balear al contar con hasta cinco ex componentes del equipo isleño como son el entrenador Juanito y los jugadores Chicho, Burrito, Rubén Cornejo y Nico Sarmiento, que se fue el pasado verano y que no podrá jugar el partido por lesión. El encuentro en Sevilla no es un partido más para los mallorquines, que buscan el punto de inflexión para salir del bache de resultados que atraviesan. No es la mejor plaza, el mejor rival, ni las mejores condiciones con las bajas de hasta cuatro jugadores con respecto a hace quince días, tres lesionados y la salida de Allan por motivos personales. Ante las adversidades toca crecer como equipo. La plantilla ha trabajado durante los últimos días para ajustar todos los aspectos que deben mejorar para recuperar el buen rendimiento ofrecido desde el comienzo de la temporada y que les había llevado a cosechar una única derrota hasta el bache de los últimos días de diciembre. El equipo quiere recuperar la fortaleza defensiva sobre la que asentó la mayoría de triunfos y que le condenó a la derrota frente al Jaén Paraíso Interior, así como aprovechar que cuenta con todos los pívot disponibles para dar un paso al frente en ataque.
Este partido puede servir de terapia mental para un equipo que quedó tocado y que ha aprovechado el descanso para desconectar y resetear mental y físicamente después de la exigencia de los tres meses de competición en los que han jugado prácticamente dos partidos cada semana. El partido frente al Real Betis se presenta como una buena ocasión para cortar con los malos resultados antes de tener dos semanas para trabajar ya que el siguiente partido no será hasta mediados de enero.