Javi Calleja, que volvía al banquillo tras cumplir un partido de sanción, había puesto en sobre aviso a los suyos, a pesar de la mala clasificación de su rival, ya que los tres equipos que habían visitado al Villarreal en puesto de descenso se había llevado los tres puntos en juego.
El Mallorca volvió al dibujo táctico de tres centrales y dos carrileros, que ya empleó en otras fases del campeonato, y exhibió una mayor consistencia que el pasado sábado ante el Barcelona, aunque en ataque no estuvo fluido y tan solo el japonés Take Kubo puso algo de originalidad en la vanguardia balear.
La primera gran ocasión del partido fue para el Mallorca, cuando a los 6 minutos de juego el centrocampista ghanés Iddrissu Baba disparó con potencia desde más allá de la frontal del área y estrelló con violencia el balón en el larguero.
En la réplica del Villarreal llegó el 1-0, gracias a una gran acción por la banda derecha de Chukweze, que, tras irse con potencia de dos defensas, colocó con habilidad un balón de oro a Bacca en el segundo palo, donde el colombiano solo tuvo que empujarlo para marcar.
Tras el tanto local, el Mallorca se hizo con el mando del partido, pero sus llegadas carecían de imaginación y el Villarreal amarró su mínima ventaja para llegar al descanso.
Los locales salieron algo más ambiciosos en la reanudación y en los primeros cinco minutos pudieron ampliar su ventaja con una doble ocasión de Chukweze, que disparó alto, y de Manu Trigueros, cuyo remate atajó Reina en una acción de reflejos del meta del conjunto mallorquín.
Vicente Moreno trató de cambiar el signo del partido y varió su dibujo táctico volviendo a los cuatro defensas y acumulando jugadores ofensivos con la entrada de Budimir y Trajkovsky, aunque sacrificó a Kubo, único futbolista del Mallorca capaz de sorprender a la zaga castellonense.
Los visitantes, más por empuje que por buen juego, fueron embotellando al Villarreal en su campo. Sin embargo, apenas inquietaron a la zaga local, que resolvió sin grandes apuros las embestidas del Mallorca.
El partido se abrió mucho en los minutos finales, con un Mallorca volcado en busca del empate. A dos minutos del final, Baba pudo conseguirlo, pero, igual que en la primera mitad, su disparo se estrelló en el larguero. Apenas un minuto después, el Mallorca perdonó de nuevo en una embarullada jugada en el área del Villarreal en la que desaprovechó una triple ocasión que solventó finalmente el lateral Quintillá salvando el gol bajo la portería.